Los motivos se relacionan con sus orígenes.
El gato es un felino, los cuales capturan a su presa y obtienen la mayor parte del agua que necesitan a través de la alimentación, por lo que tienden a beber muy poco. No obstante, es cierto que los gatos domésticos comen pienso seco, por lo que deben tener siempre agua fresca a disposición para poder obtener la que les falta en la comida.
Normalmente, los dueños les suelen poner un cacharro con agua al lado del de la comida. Pero, ¿te has fijado alguna vez que los gatos no beben de este agua?
Por qué no bebe el gato del cacharro que está al lado del de la comida
¿Te has dado cuenta de que los gatos no beben agua de su cacharro si lo ponemos al lado del de la comida? Lo que podría resultar como algo muy extraño, nos dicen los expertos en comportamiento felino que se trata de algo completamente normal. Cuanto más lejos esté el cacharro de la comida del del agua, el gato estará más interesado en él y tenderá a beber más.
Pero, ¿por qué?
Se trata de un motivo que tiene que ver con los orígenes del gato y con sus instintos por naturaleza de dicho felino. Cuando los gatos eran aún animales salvajes, establecieron una relación entre los cadáveres de los animales muertos -y, por con siguiente, de la comida- al hecho de que el agua podría estar contaminada.Básicamente, los gatos comían en un sitio y bebían únicamente en aquellos lugares en los que no había animales muertos. Los sitios con agua tenían que ser una especie de zona neutra.
De hecho, que el agua esté cerca de la comida podría aumentar el riesgo de aparición de bacterias, ya que el gato podría comer y después beber del agua con restos de comida en la boca. ¿Qué hacer? Lo mejor es aceptar la naturaleza de nuestro gato y ponerle varios cacharros con agua lejos del de la comida, para que así pueda escoger.
Agua para el gato – dónde colocar el cacharro
Debemos recordar también que, además del de la comida, el cacharro del agua debe estar lejos de la basura, ya que de lo contrario podría contaminarse y resultar peligrosa. A los gatos, el agua que esté lejos de la comida y lejos de la basura les parecerá agua limpia. Debemos recordar también usar un cuenco con un diámetro amplio, pero que sea poco profundo, que les recuerden a los sitios en los que normalmente beberían en la naturaleza (ya que no podrían esconder a posibles predadores). El gato está siempre a la búsqueda de agua fresca y limpia, nunca estancada, lo cual es el motivo por el que le encanta beber agua del grifo. Puede que de vez en cuando veamos al gato volcar el cuenco: a veces lo hace para explorar las profundidades del agua, pero otras veces también lo hace porque se siente atraído por las posibles presas que se pudieran encontrar dentro.